Donald Trump vs. Kamala Harris: cómo podrían transformar la economía de EEUU las políticas de cada candidato
Las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos presentan dos visiones económicas marcadamente diferentes, cada una con sus propias implicaciones para la economía.
Con la proximidad de las elecciones presidenciales en Estados Unidos y un panorama más claro en cuanto a las candidaturas, desde el Centro de Estudios Políticos y Económicos (CEPEC) analizaron las posibles consecuencias económicas de los potenciales triunfos de Donald Trump o Kamala Harris.
Así, el documento estudió cómo las políticas económicas propuestas por ambos candidatos podrían impactar la economía de Estados Unidos, haciendo principa foco en el «equity y otros factores económicos clave«. De esta manera, cada candidato podría influir en estos aspectos críticos de la economía, determinando las posibles repercusiones para los mercados financieros y el crecimiento económico del país.
Impacto de un Triunfo de Donald Trump
De acuerdo con el documento de CEPEC que, dirige Leo Anzalone, las políticas de Donald Trump podrían beneficiar a las industrias de energía y defensa. «Esto nace de evaluar sus dichos más recientes, pero fundamentalmente en su historial y sus propuestas políticas anteriores«, analiza el documento.
Las políticas económicas de Trump se caracterizaron por un enfoque «en el proteccionismo y el impulso al crecimiento económico a través de recortes fiscales y desregulación«. Una de las políticas más destacadas durante su presidencia fue el uso de aranceles comerciales y medidas proteccionistas, con el objetivo de proteger las industrias nacionales de la competencia extranjera. Esta estrategia buscó fortalecer la producción interna y reducir la dependencia de las importaciones, aunque también generó tensiones comerciales y aumentó los costos para las empresas que dependen de cadenas de suministro globales.
En términos de política fiscal, «Trump implementó significativos recortes de impuestos tanto para individuos como para corporaciones, combinado con un aumento en el gasto público» sostiene el CEPEC, «especialmente en infraestructura y defensa«. Estas medidas habían sido diseñadas para estimular el crecimiento económico a corto plazo, pero también suscitaron preocupaciones respecto al incremento del déficit fiscal y la deuda pública, dado el considerable gasto gubernamental en el que incurrió.
En cuanto al sector energético, Trump ha manifestado un fuerte apoyo a la industria de combustibles fósiles, promoviendo la desregulación ambiental y facilitando la expansión de la extracción de petróleo, gas y carbón en su gestión anterior. Esta postura buscó revitalizar las industrias energéticas tradicionales, generando empleo y crecimiento en estas áreas, aunque a menudo se encentró en conflicto con las políticas internacionales y los compromisos sobre el cambio climático.
Estas políticas económicas clave reflejan la estrategia que mantuvo Trump durante su presidencia; priorizó el crecimiento económico inmediato y el fortalecimiento de sectores estratégicos a través de la desregulación y el proteccionismo, aunque a menudo a costa de mayores tensiones comerciales y preocupaciones sobre sostenibilidad fiscal y medioambiental. «Consideramos, a partir de lo anterior, que, en el caso de un triunfo, los lineamientos generales serán parecidos», concluye el análisis.
Impacto en Wall Street
Volatilidad: las políticas proteccionistas y las tensiones comerciales podrían aumentar la volatilidad en el mercado. Los sectores industriales y de energía podrían beneficiarse inicialmente, mientras que las empresas tecnológicas y exportadoras podrían enfrentar desafíos.
Sector Beneficiado: las acciones de empresas en sectores de energía y defensa podrían ver un aumento, mientras que las industrias dependientes de exportaciones podrían sufrir.
Confianza del Inversor: la confianza del mercado podría fluctuar dependiendo de la percepción de estabilidad y de las relaciones comerciales internacionales.
Por lo tanto, los sectores que podrían beneficiarse en un principio de un segundo mandato de Trump incluyen la industria energética y la industrial. La industria energética se vería favorecida por la desregulación y un endurecimiento de las sanciones a países como Irán, lo cual podría beneficiar a fondos como el SPDR S&P U.S. Energy Select Sector UCITS ($SXLE). Estas medidas permiten a las empresas de energía aumentar su producción y reducir costos regulatorios, impulsando su crecimiento y rentabilidad.
Trump vs. Harris: fuente CEPEC.
Por otro lado, el sector industrial podría ganar con políticas de «re-shoring» que incentivan el retorno de las cadenas de suministro a Estados Unidos, alejándolas de China, y un aumento en el gasto en defensa. Esto proporcionaría un impulso a la manufactura y la infraestructura local, beneficiando a fondos como el SPDR S&P U.S. Industrials Select Sector UCITS ($SXLI).
Además, el incremento en el presupuesto militar podría traducirse en más contratos y proyectos para empresas de defensa, impulsando el sector industrial en general ($ITA). Vale hacer una mención al Real State, industria que también consideramos podría verse beneficiada con Trump ($IYR).
Impacto de un Triunfo de Kamala Harris
En cambio, si se confirma la designación demócrata, las políticas económicas propuestas por Kamala Harris se centran en la redistribución de la riqueza, el fortalecimiento de los programas sociales y la inversión en sectores clave como la educación, la salud y la energía renovable.
Una de las principales iniciativas de Harris es el aumento de impuestos a los individuos y corporaciones más ricos, con el objetivo de financiar programas sociales que aborden la desigualdad económica. Esta política busca reducir la brecha entre los diferentes grupos socioeconómicos y asegurar un acceso más equitativo a los recursos y oportunidades económicas.
En el ámbito de la salud, Harris aboga por la expansión del sistema de salud pública, buscando reducir los costos de los medicamentos y mejorar el acceso a servicios de salud de calidad para todos los ciudadanos. Este sector podría experimentar un crecimiento significativo debido al apoyo de Harris para su expansión y la reducción de los costos de los medicamentos. Estas políticas no solo aumentarían el acceso a servicios de salud, sino que también crearían empleos en la industria sanitaria y farmacéutica, impulsando la demanda de personal médico y tecnológico en este campo.
Una de las principales iniciativas de Harris es el aumento de impuestos a los individuos y corporaciones más ricos.
Reuters
En cuanto a la educación, Harris propone aumentar la inversión en educación pública y abordar la crisis de la deuda estudiantil. Al mejorar el acceso a una educación de calidad y reducir el peso de la deuda estudiantil, se espera que más individuos puedan participar activamente en la economía, contribuyendo a un crecimiento económico más sostenible y equitativo.
Además, Harris pone un fuerte énfasis en la inversión en energía renovable y la implementación de políticas ambientales estrictas. Al apoyar la transición hacia fuentes de energía limpias, busca no solo mitigar el impacto del cambio climático, sino también impulsar el crecimiento de la industria de tecnología limpia y crear empleos en este sector emergente.
Estas políticas económicas clave de Kamala Harris reflejan un enfoque en el crecimiento sostenible a largo plazo, con un fuerte énfasis en la equidad social y la responsabilidad ambiental. Buscan reestructurar la economía para ser más inclusiva y resiliente, mientras se promueve una transición hacia un futuro más verde y justo.
Impacto en Wall Street
- Estabilidad a largo plazo: las políticas de Harris podrían ofrecer una mayor estabilidad económica a largo plazo, aunque el aumento de impuestos podría generar preocupaciones en algunos sectores del mercado inicialmente.
- Sector beneficiado: Las empresas de energía renovable, tecnología limpia, salud, y educación podrían recibir un impulso significativo debido a políticas favorables y aumento de la demanda.
- Confianza del inversor: Mayor previsibilidad en la política económica podría mejorar la confianza del inversor, reduciendo la volatilidad a largo plazo.
Bajo una administración de Kamala Harris, los sectores que podrían ver beneficios significativos son aquellos relacionados con la energía renovable, la salud y la educación. La industria de energía renovable podría recibir un fuerte impulso debido al énfasis de Harris en combatir el cambio climático y promover fuentes de energía limpia. Esto beneficiaría a fondos como el iShares Global Clean Energy ETF ($ICLN), ya que habría un aumento en la inversión y desarrollo de tecnologías como la solar y la eólica, creando nuevas oportunidades de negocio y empleo en el sector.
El sector de la salud también podría experimentar un crecimiento gracias a las propuestas de Harris para expandir el sistema de salud pública y reducir los costos de los medicamentos. Este enfoque aumentaría el acceso a servicios de salud, beneficiando a empresas como CVS Health Corp ($CVS) y UnitedHealth Group ($UNH), que están bien posicionadas para aprovechar una mayor demanda de servicios médicos y farmacéuticos. La expansión del acceso a servicios de salud también podría
Harris y a qué sectores apostar
fomentar un aumento en la demanda de tecnologías médicas, beneficiando a compañías como Medtronic ($MDT) y Abbott Laboratories ($ABT).
Asimismo, el sector educativo se vería favorecido por las políticas de Harris, que promueven una mayor inversión en educación pública y abordan la crisis de la deuda estudiantil. Estas medidas podrían estimular la demanda de infraestructura educativa, recursos didácticos y servicios relacionados. Empresas como Pearson ($PSO) y Chegg (CHGG), que se especializan en recursos educativos y tecnología de aprendizaje, podrían beneficiarse del impulso a la educación pública y del aumento en el acceso a la educación.
Creemos que con los demócratas otro sector a tener en cuenta es el de consumo masivo, donde juegan las empresas más importantes y reconocidas del mundo, pero también el ETF $XLP.
Un triunfo de Donald Trump podría llevar a un crecimiento económico rápido a corto plazo, pero con riesgos de inflación, deuda creciente y volatilidad en los mercados debido a políticas proteccionistas y desregulación. La bolsa podría beneficiarse en sectores como energía y defensa, mientras que la Fed enfrentaría presiones para mantener tasas bajas.
Por otro lado, un triunfo de Kamala Harris podría ofrecer estabilidad y crecimiento sostenible a largo plazo, con un enfoque en la reducción de desigualdades y la inversión en sectores estratégicos como la energía renovable y la educación. La Fed podría operar con mayor independencia y permitir un ajuste más equilibrado de las tasas de interés, lo que podría beneficiar al mercado de bonos a largo plazo.