No hay plata para las embarazadas con VIH: denuncian que Milei dejó de entregar una droga clave a las provincias
Según PBA, el presidente recortó el envío de medicamentos para pacientes de VIH gestantes que previenen la transmisión vertical de la enfermedad. Organizaciones que acompañan a pacientes, además, denuncian que desde junio no se hicieron compras y los hospitales ya no tienen más stock.
El ajuste del presidente Javier Milei a la salud pública alcanzó también a las personas gestantes que son pacientes de VIH y que ahora no pueden acceder a la Zidovudina (AZT) EV, una droga indispensable durante el trabajo de parto para prevenir la transmisión vertical de la enfermedad a sus recién nacidos. Así como no envió una sola caja de misoprostol para garantizar abortos legales desde el comienzo de la gestión, el desprecio del mandatario hacia la salud sexual desembocó en el nulo envío de ampollas de AZTV a varias provincias. Por ejemplo, los hospitales no tendrán reposición desde el 1 de noviembre, según denunció el Ministerio de Salud de la Provincia de Buenos Aires. «Es una situación gravísima», sumó en diálogo con El Destape José Di Bello, presidente de la Fundación Grupo Efecto Positivo e integrante del Frente Nacional VIH.
Organizaciones que acompañan a pacientes advirtieron que desde junio de este año que la Compra Directa de las AZT se consideran desiertas. «Ahora refieren que ya se logró una compra internacional y están intentando acelerar el proceso de desaduanaje», explicó Di Bello respecto a la respuesta que recibieron por parte de la Dirección de VIH/SIDA de Nación.
Fuentes del Ministerio de Salud de PBA afirmaron que las cajas de Zidovudina que tienen en stock «tienen fecha de vencimiento 31/10», con lo cual no se podrán utilizar a partir de mañana, ante la falta de envío de nueva medicación por parte de Nación. «Ante las reiteradas consultas informaron que el 27/10 llegó al país la medicación pero que aún resta el desaduanaje por lo que no está disponible aún para la distribución a las provincias. En paralelo, se solicitó al laboratorio productor de la médicacion en stock la extensión de vencimiento, pero aún no presentó la documentación en ANMAT», puntualizaron.
En un comunicado, el Ministerio de Salud bonaerense no solo dio cuenta del faltante, sino que además destacó que el beneficio que garantiza esta medicación «está ampliamente documentado». Su indicación se encuentra limitada a los escenarios de mediano y alto riesgo, en los que la persona gestante aún presenta carga viral detectable o ésta es desconocida. Los estudios demuestran que, en esta situación, la infusión de AZT intraparto junto a la administración de profilaxis antirretroviral al Recién Nacido (RN) y una cesárea electiva, reducen la transmisión a menos del 2%», puntualizó el documento.
Del mismo modo, Fundación Huésped sostiene en su guía para promotores comunitarios sobre sexualidad y embarazo que una mujer que vive con VIH puede trasmitur el virus a su bebé durante el embarazo, el parto o la lactancia. «La transmisión vertical o perinatal es la principal vía de infección por VIH entre los niños. Se estima que existe un 30% de probabilidades de transmitir el virus de la madre al bebé si la mujer no recibe atención médica durante el embarazo, el parto o la lactancia» por lo que una atención médica adecuada resulta esencial.
La falta de abastecimiento del gobierno nacional vuelve a relegar la salud pública a las provincias y pone en riesgo ahora a los recién nacidos, que no tienen tiempo para esperar a que lleguen las cajas de ampollas desde otros hospitales, cuando se registran faltantes. De acuerdo al Ministerio de Salud de PBA, «es importante reforzar en estos casos las medidas de intervención destinadas a realizar un diagnóstico precoz y un tratamiento temprano, realizando test rápido y/o ELISA en gestantes que desconocen su diagnóstico, en cualquier momento de la gestación y el inicio oportuno del tratamiento antirretroviral» pero «en el escenario de alto riesgo neonatal se debe iniciar profilaxis combinada dentro de las 6 horas del nacimiento».
Este medio se comunicó con el Ministerio de Salud de la Nación para que brinde precisiones respecto a las compras de las ampollas durante todo 2024 y su garantía de provisión, pero no obtuvo respuestas. Tampoco las obtuvieron las organizaciones que acompañan a los pacientes y que ya salieron a la calle para denunciar que el presupuesto propuesto por el Gobierno para 2025 recorta un 76% los fondos destinados a la respuesta al VIH, Hepatitis, ITS y Tuberculosis.
Desde hace más de 20 años, el Ministerio de Salud de la Nación realiza las compras para segurar la provisión en forma gratuita de tratamientos de alto precio a personas que se atienden en el sistema público de salud. Por eso, las organizaciones alertan que sin el presupuesto adecuado, «el sistema de salud público no podrá sostener los tratamientos ni la prevención», teniendo en cuenta que ya durante todo este año se vio una paralización de compras públicas. «Venimos enfrentando faltantes de algunos medicamentos, lo que ha provocado cambios forzados de tratamientos, faltantes de preservativos, como así también también falta de reactivos para estudios de carga viral y celulas cd4, testoes fundamentales para el monitorieo de la efectividad y la seguridad de los tratamientos», advirtió GEP en un comunicado.
El panorama es sombrío. Afirman que las asignaciones no permitirán la adquisición de todos los medicamentos e insumos necesarios de salud, básicos para la prevenvión y el tratamiento del VIH, las hepatitis y la tuberculosis. «Esto acarreará en un aumento de nuevos caso, diagnósticos tardíos, mayor mortalidad y aún más carga sobre el sistema de salud», enfatizaron.
Fuente: El destape