Balacera a un colectivo: la instigó un preso a pesar de estar en el programa de alto perfil
La investigación por esta y otras causas impulsaron los 30 allanamientos en los que se secuestró 10 kilos de cocaína que le atribuyen a René «Brujo» Ungaro
La Policía de Investigaciones y la división Asuntos Internos de la policía de la provincia realizaron más de 30 allanamientos en los alrededores del complejo Fonavi ubicado en Sánchez de Thompson al 200 bis. Allí secuestraron 10 kilos de cocaína y detuvieron a cinco personas. Están vinculadas a René «Brujo» Ungaro, condenado por homicidios y narcotráfico y preso en una cárcel federal. También a Carlos Jesús «Peloduro» Fernández, preso en la cárcel de Coronda, apuntado como instigador de la balacera a un colectivo ocurrido a comienzos de mes y por el cual hay un menor privado de la libertad.
En conferencia de prensa el fiscal Franco Carbone, uno de los funcionarios del Ministerio Público de la Acusación a cargo de la investigación, indicó que la policía logró el secuestro de los 10 kilos de cocaína y la detención de cinco personas. Entre ellas, la pareja de Ungaro, que era requerida por la Justicia federal. Los operativos se impulsaron por una investigación conexa por extorsiones, narcotráfico y la balacera a un colectivo.
En ese sentido, Carbone explicó que también investigaron en conjunto con la Procuraduría de Narcocriminalidad, que trabajará sobre el secuestro de la cocaína. Mientras que por la Justicia provincial, adelantó el fiscal, buscarán el cese de estado antijurídico para inhabilitar las viviendas vinculadas a esa red que eran utilizadas como aguantaderos o puntos de venta.
Otra de las causas abordadas en esta investigación conjunta fue la balacera contra un colectivo de la línea 146 ocurrida el 5 de septiembre. Un hecho por el cual hay un menor detenido en el Centro Especializado de Responsabilidad Penal Juvenil (Cerpj) y a raíz del cual se realizaron otros allanamientos en la zona.
De allí surgió la información que terminará de conocerse en la audiencia imputativa que se realizará este viernes, pero que ubica a Peloduro Fernández como instigador. También se conocerá en la acusación cómo fue que hizo este recluso, condenado por homicidio y preso en el programa de alto perfil, para ordenar el ataque.
El Brujo
René “Brujo” Ungaro fue situado en 2021 como el único organizador de una banda dedicada al narcotráfico que en esos últimos años se impuso a fuerza de violentos delitos en los barrios Tablada y Municipal. Un tribunal federal que lo juzgó junto a catorce personas le asignó ese rol al condenarlo a 12 años de prisión por de tráfico organizado de drogas, mientras que los hermanos Alan y Lautaro Funes fueron condenados a 9 años de cárcel por el mismo delito pero sin una posición de liderazgo en la banda.
“El fallo resaltó el rol directriz de René. Podemos discutir si son todos parte de una misma empresa o cada uno administra su sector, pero hay una clara preeminencia de René por razones no sólo de tráfico de drogas, sino por su posición jerárquica en el barrio”, analizó en aquel entonces el fiscal Federico Reynares Solari, quien acusó al grupo.
Así, si bien el volumen de circulación de drogas detectado no se consideró significativo, sí se registró que “el tema del control territorial requería de un esfuerzo constante” por parte del grupo y se ejercía con mucha violencia: “Había un despliegue territorial y un control que tenía que ser defendido todo el tiempo”. Es lo que evidenciaron las escuchas ordenadas cuando René ya estaba en prisión, donde cumple condena desde 2011 por el asesinato del ex jefe de la barra de Newell’s Roberto “Pimpi” Caminos.
Desde Piñero, la organización a su mando se consolidó y se expresó en incidentes como los de agosto de 2019, cuando una ataque a tiros frente a la cárcel desnudó un negocio ilegal con la venta de turnos para el ingreso en los días de visita. La condena federal para René y su gente llegó dos meses y medio después de que el “Brujo” fuera sentenciado en un juicio oral de la Justicia provincial. En ese ámbito fue sentenciado a 7 años de prisión como jefe de una asociación ilícita por la que ya habían sido condenadas otras 14 personas en procedimientos abreviados. En 2021, después de la fuga de reclusos de la cárcel de Piñero, Ungaro fue trasladado al penal federal de Ezeiza y luego al de Rawson.
Peloduro
Carlos Jesús Fernández tiene 33 años y es oriundo del barrio República de la Sexta. Nació el 22 de noviembre de 1990, en el inicio de una década que hundió al país en una profunda crisis social y económica y degradó a miles de hogares. Su nombre puede ser uno más, pero cuando se lo identifica por su apodo, «Peloduro», el mundo judicial y policial lo reconoce inmediatamente por las decenas de robos y arrebatos que se le achacaron desde muy temprana edad.
Tras un largo tiempo en el ostracismo, aquel adolescente que dejó la escuela tras repetir cinco veces 4º grado, reapareció ya hecho un adulto. Fue en 2017, cuando el enfrentamiento entre bandas se profundizó en los barrios Tablada y República de la Sexta. Entonces su nombre cobró fuerza como integrante de uno de los grupos que, en sociedad con los Funes mantuvo enfrentamientos con el clan que desciende del ex líder de la barra brava de Newell’s Old Boys, el asesinado Roberto «Pimpi» Caminos.
Dos años después, Peloduro fue condenado a 12 años de prisión en un juicio abreviado por un catálogo de delitos que van desde el homicidio calificado hasta la asociación ilícita, pasando por abusos de arma de fuego y distintas agresiones. Junto a él fueron condenados Lautaro Nahuel «Lamparita» Funes y Matías Ezequiel «Mojarra» Ocampo. El delito más violento del que se hicieron fue el asesinato de Cristian Alejandro «Bebe» Ferreyra, un chico de 17 años emboscado a balazos desde un auto en Biedma y Colón el 9 de mayo de 2017.
Fuente: La Capital